Mundo onírico: entre sueños y pesadillas. A pesar de que existen infinidad de teorías, que explican la función que cumplen los sueños, todavía no hay un 100% definida. Según lo que indican algunas de ellas, el cerebro es capaz de utilizar los periodos oníricos para reorganizar los recuerdos; asimilar, eliminar o experimentar las conexiones neurológicas que no se utilizan.
Todos hemos experimentado lo que el cerebro nos muestra al dormir, que pueden ser llenas de terror o de alegría. Sin embargo, son realmente útiles para los científicos, ya que cumplen con un escenario de modo virtual, que ayudan a afrontar futuros desafíos.
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Mundo onírico desde la antigüedad
Incluso desde la antigüedad, los seres humanos han tenido cierto grado de curiosidad por el mundo onírico. Por ejemplo, en Mesopotamia, se apuntaba a que los sueños debían ser colocados en piedra o en las zonas de Grecia, existía la costumbre de la oniromancia, lo que consistía en la adivinación del futuro por medio de los sueños.
A mediados del siglo XX, muchas personas querían encontrar mensajes divinos ocultos en ellos, pero tras el estudio del psicoanálisis de Freud, pasaron a ser interpretados como el reflejo del inconsciente, además, de ser objeto de estudio para psiquiatras y psicólogos.
Mundo onírico a través de la ciencia
Las vivencias oníricas que experimentan los mamíferos, en términos más científicos, se producen principalmente en el sueño, al momento de la fase REM. Específicamente, cuando el cerebro está mucho más activo, lo que llega a repetirse el 25 % del tiempo en que descansamos, cada 90 min.
A pesar de que se conocen detalles sobre la fisiología del sueño, aun los científicos no han encontrado la explicación sobre: ¿Por qué soñamos? ¿para qué le sirve al cerebro? Pues, según lo que han arrojado algunas investigaciones, soñar no tiene una determinada función, sino que, únicamente se deben a la actividad que posee el cerebro al momento de la fase REM, sin embargo, no todos los resultados concuerdan con ello.
Mundo onírico: Nicholas Humphrey
Para algunos científicos expertos como, Nicholas Humphrey, los sueños en realidad poseen un sentido conectado con la emocionalidad. Sirven para procesar mucho mejor, la variedad de conflictos emocionales que se enfrentan cada día, asiéndoles frente a los miedos.
Según el psicólogo, Humphrey, habría que ver la capacidad de soñar como una posibilidad de evolución, que ayuda a afrontar y superar acontecimientos que se presentan durante la vida.
Mundo onírico: según otras investigaciones
Otros expertos en el tema del ensueño, aseguran que soñar funciona al contrario de lo antes mencionado. Están presentes en la vida de todos los seres humanos para limpiar el cerebro de sucesos dolorosos y procurar de manera sencilla, la recuperación psicológica.
En el caso de las pesadillas, estas podrían tratarse de entrenamientos para afrontar situaciones de trauma, producidas en tiempo real, ya que durante el momento de la fase REM, las hormonas del estrés y los neurotransmisores, apenas estarán conectados, lo que significa que, remover dichos eventos de trauma podrían dejarlos atrás.
Algunos científicos sugieren que mientras se duerme, las áreas donde se encuentran las costumbres o la lógica habitual dentro del cerebro, se desactivan, lo que nos llevaría a conocer más rutas alternas para resolver inconvenientes.
Mundo onírico: pruebas de investigación
En la universidad de Harvard, en el 2010, dos científicos decidieron colocar a dos participantes como prueba de un experimento. La intención era que memorizaran los caminos de un laberinto diseñado en 3D y encontraran la salida.
Por medio de ello, descubrieron que, si ambos sujetos dormían y al mismo tiempo, soñaban con la prueba, estos al levantarse eran mucho más productivos para continuar con el experimento que los demás.
Esto se debe, porque la memoria ha tenido un papel importante. Los expertos consideran que casi todos los procesos que ocupan a la memoria ocurren mientras se descansa y que, si se revelan sueños, es por consecuencia de ese fenómeno.
Algo más sobre el mundo onírico
A pesar de este último detalle, con relación a la memoria. Hay expertos que aseguran que, al descansar en vez de poder recordar, se sueña para borrar las conexiones existentes del cerebro que no se utilizan.
Se trata sobre la teoría de “aprendizaje inverso” la cual indica, que sin este borrador al momento de la fase REM, cada cerebro no podría funcionar plenamente con total rendimiento, durante la vigilia.
Hasta ahora las investigaciones mencionadas son las más significantes entre muchas otras. Al pasar los años, se irán descubriendo otros resultados por medio de nuevos avances científicos.
